La acusación.
Cuentos prohibidos de Corea del Norte. Bandi, Asteroide, 19,95 €
Estremece saber que el autor de este libro desolador, funcionario coreano, consiguió sacar el manuscrito de su país en 2013 para hacérselo llegar a un familiar en la vecina Corea del Sur. El libro fue publicado bajo seudónimo (el escogido, Bandi, significa luciérnaga). Poco se sabe de él, si bien sus editores surcoreanos no facilitan más información para proteger su integridad. Solo sabemos que se trata de un miembro de la Federación de Autores de Choseon, asociación oficial dependiente del departamento de Propaganda y Agitación, que tuvo que abandonar la escritura para dedicarse a su trabajo de obrero. Lo que sigue son siete relatos asfixiantes, ambientados en la década de los años noventa, bajo los mandatos de Kim Il-sung y Kim Jong-il. Relatos estremecedores, de corte kafkiano, de sabor y textura gris. Gris contaminado como la polución de sus ciudades y la mente de un aparato estatal que controla hasta extremos ridículos e insospechados la vida de los ciudadanos. Un ridículo que casi mueve a la risa, si bien esta se congela por las terribles consecuencias que puede tener algo tan banal como las pesadillas infantiles de un niño ante el retrato de Karl Marx, que le recuerda a un monstruo de la mitología coreana. Una pequeña joya por el sincero y terrible testimonio que recoge de la trastienda del país más hermético del mundo, un relato teñido de tristeza, sospechas, delaciones y miedo.
