Diana Talarewitz, nacida en Barcelona, es abogada especialista en Derecho de Familia y Agente Oficial de la Propiedad Industrial. Ha publicado el libro de relatos Parejas (2a008) y La última judía (2015), ambas en editorial Amarante. Ahora vuelve a la ficción con La decisión de Julia, historia de una mujer de casi sesenta años que se encuentra en una encrucijada vital desencadenada por las redes sociales. Ante el regreso de un luminoso amor de adolescencia, debe decir qué camino tomar. Al mismo tiempo, se mimetia con la novela de Colette que está traduciendo.
. La vida de Julia, la protagonista, a punto de cumplir sesenta, se encuentra en una encrucijada vital, y se hace muchísimas preguntas. ¿Cree que refleja las inquietudes de las mujeres de su generación?
No se puede generalizar, habrá muchas mujeres que no se planteen estas inquietudes, pero lo cierto es que muchas lectoras se han sentido como Julia. Y lo más sorprendente es que no solo afectaba a las de su generación, sino también a mujeres más jóvenes.
. Esta generación de mujeres ha seguido, en la mayoría de los casos, una trayectoria en función de lo que se esperaba de ellas, principalmente como esposas y madres. ¿Cree que las generaciones más jóvenes aún siguen «programadas»? Lo digo en el sentido de que, a pesar de tener más oportunidades profesionales, mujeres más jóvenes parecen haber sumado la obligación de llevar a cabo una brillante carrera profesional y de estar físicamente deseables.
Las mujeres de hoy en día ya no están destinadas sólo para ser esposas y madres. En la actualidad, desean también tener una formación y una profesión que les permita gozar de independencia económica y vital. Para lograr estos ideales se ven sometidas a un gran esfuerzo físico e intelectual pero que sin duda alguna, compensa.
. Mario y Stefano no tienen mucho qué ver el uno con el otro.
El personaje de Mario hace referencia al marido convencional que se acomoda y cae en la rutina, mientras que Stefano es un un hombre vital con gusto por la vida y eso es lo que hace que Julia se vea atraída por él.
. ¿Juegan las amigas una función liberadora?
Efectivamente, las amigas juegan siempre una función liberadora. A diferencia de los hombres las mujeres se inclinan a compartir sus emociones con las amigas y el solo hecho de verbalizar sus conflictos, las libera.
. En la obra, la protagonista, Julia, está traduciendo una novela de Colette. ¿Por qué escogió a esta autora? ¿Tuvo a otras en mente?
La casualidad puso en mis manos su libro El nacer del día, traducido por una amiga que me regaló un ejemplar. Al leerlo no tuve duda de que esta autora, anticipada a su tiempo, sería el personaje que transformaría a Julia.
. ¿Qué aconsejaría a otras mujeres a la hora de vivir sus vidas?
Nunca me atrevería a aconsejar a nadie cómo vivir su vida. Cada persona tiene que buscar lo que quiere y necesita incluso si cae en errores y contradicciones. En eso consiste la vida, en un buscar sin fin.
LA DECISIÓN DE JULIA
Diana Talarewitz
Amarante, 245 pp., 20 €.