Texto: QL.
© STACEY WYZKOWSK
El conflicto de los Balcanes dejó una desgarradora herida en la sociedad europea y en la balcánica en particular y la huella del conflicto se sigue reflejando en la producción cultural de la antigua y despedazada Yugoslavia y de sus países vecinos. Un conflicto donde estallaron las diferencias culturales, religiosas, geográficas y políticas entre los habitantes de las diferentes etnias del país.
La novela que presenta editorial Berenice, Yo sigo contando los días, del búlgaro Georgi Bardarov, está basada en una historia real y se cuenta en términos de periodismo literario. Se sitúa en 1993 cuando Bosnia y Macedonia reclaman su autonomía, pero los serbio-bosnios, apoyados por el ejército yugoslavo, se oponen y atacan Sarajevo, la capital bosnia, que es sitiada: hay bombardeos, francotiradores, faltan alimentos y servicios básicos.
La trama gira alrededor de una pareja de jóvenes que lo tienen todo en su contra, Davor, un cristiano, y Aida, una joven musulmana, se enamoran a pesar de sus diferencias culturales y de que sus pueblos están enfrentados. Planean fugarse juntos, pero para escapar deberán cruzar el puente que atraviesa el río Miljacka, en una tierra de nadie entre líneas serbias y musulmanas. A la pareja se la conoce hoy como los Romeo y Julieta de Sarajevo, y su historia es un testimonio veraz del horror que entraña cualquier guerra. En uno de los párrafos se recuerda que «Era el invierno del noventa y dos, con un frío terrible, con hambre, oscuridad y un tiroteo incesante desde las colinas. Quedaba claro ya que nadie iba a parar esa locura, que a nadie le importaban los habitantes de la ciudad. Los medios de comunicación divulgaban estupideces y la gente fallecía cada día. En aquel entonces estalló el mayor escándalo entre ellos. Riñeron por la religión. Ésta, la que presuponía unir a la gente, hacerla más bondadosa, más humana, más cercana a la perfección y a Dios. Aunque esa misma religión ya separaba familias, amigos, enamorados y asesinaba a inocentes».
Esta inolvidable novela —el mayor éxito de la literatura balcánica— tiene también como protagonista al propio autor, que visita Sarajevo veinte años después en calidad de profesor universitario para buscar la verdad sobre el conflicto. Con la ayuda de un traductor serbio, habla con diversas víctimas, pero también con sus verdugos. En ese periplo aflorarán gestos de insólita valentía y solidaridad, pero también momentos de extrema crudeza, que muestran la cara más horrenda de la condición humana. Georgi Bardarov narra con maestría tanto la hermosa relación de los jóvenes enamorados, sometida a toda clase de escollos, como la desintegración de un país y la insensatez del odio.
Este autor es profesor universitario, vicedecano de la Facultad de Geología y Geografía de la Universidad de Sofía y especialista en demografía y conflictos etno-religiosos. Es además fundador y copresentador del curso más exitoso en Bulgaria de Presentación y Dominio Verbal, ha sido tres veces ganador del concurso para oradores, presentadores y narradores «Maestro de las palabras» y forma también parte del equipo creativo de la productora Musagena, cuyo principal objetivo es abrir camino en el arte a jóvenes autores búlgaros de diversos campos creativos. Contemporáneo de autores como David Albahari, Miljenko Jergović, Aleksandar Hemon, Dragan Velikić, Daša Drndić, Mircea Cărtărescu, Svetislav Basara o Dubravka Ugrešić, en 2013 adquirió celebridad cuando un cuento suyo se convierte en pocas semanas en una sensación y un éxito absoluto en Bulgaria, ampliamente compartido en las redes sociales y llegando a ser el cuento búlgaro más leído en internet, con más de 350 000 lecturas. Es autor de los ensayos Inmigración, conflictos y transformación de identidad en la UE, 27 grandes historias del fútbol, de los libros de cuentos Sobre la quinta rakía o qué bella es la vida y Abuelo. Con la novela Yo sigo contando los días se convirtió en el ganador del primer reality para escritores, El manuscrito, transmitido por la Televisión Nacional de Bulgaria (BNT) en 2016. La obra fue un best seller, obtuvo numerosas nominaciones a diferentes premios, ganó el premio al mejor debut del Club Literario Peroto y fue nominada como Novela del Año en los dos rankings más prestigiosos del país.
YO SIGO CONTANDO LOS DÍAS
Georgi Bardarov
Berenice, traducción de Rumen Grigorov, 256 pp., 17 €