Félix Ovejero (Barcelona) es doctor en Ciencias Económicas y ha realizado estancias en universidades estadounidenses. En la actualidad es profesor de Filosofía Política y de Metodología de las Ciencias Sociales de la UB. Colaborador en Revista de libros y Claves de razón práctica y en prensa (durante años en El País y ahora en El Mundo). Es autor de numerosos trabajos sobre socialismo, teoría de la democracia, republicanismo, nacionalismo y filosofía de las ciencias sociales.
Por su parte, Julio Valdeón (Valladolid, 1976) es licenciado en Historia y ejerció de corresponsal en Nueva York de 2005 a 2021. Columnista de El Mundo, ha trabajado en numerosos medios, ha publicado diversas novelas, ensayo, crónica y biografías.
Ahora presenta La razón en marcha: conversaciones con Félix Ovejero, donde este comparte su saber sobre los asuntos más diversos, de los problemas de las ciencias sociales a la racionalidad, la biología, la naturaleza humana, las convulsiones de la democracia, el identitarismo, la crisis y la posible refundación de la izquierda, el auge woke o la fundación de Ciudadanos.
1. ¿Cuándo empezó a escribir?
Para mí, como ensayista, escribir es una manera de ordenar ideas en forma de razonamientos. En ese sentido, pues desde bastante joven, en el bachillerato. Publicar es otra cosa: exponer las ideas a la razón pública. Yo lo hice, en torno a los veintipocos, en dos líneas: ensayo académico, incluidos los libros, e intervenciones políticas, en revistas de la izquierda radical, Mientras tanto, el Viejo Topo, y en El País, en las páginas de opinión, esto último ya más madurito, en la treintena tardía.
2. ¿Cuándo y cómo escribe?
Escribo en casa. Carezco de los talentos del corresponsal de guerra, de repentizar en cualquier parte. Y respecto al cómo, pues, anotar, en cualquier momento, últimamente dictando notas transcritas en el teléfono. Debidamente, por la mañana, entre las seis y las doce, aunque puedo pulir en cualquier momento.
3. ¿A mano o a máquina? (la escritura, no el lavado).
A máquina, vamos, en procesador de textos. Quizá alguna nota en papel, aunque que cada vez me cuesta más entender mis notas.
4. ¿Tiene alguna manía o hábito ante el momento de la escritura?
No sé si es manía, yo más bien diría estrategia: necesito estar enfadado, indignado. Cierto día reparé que la mayor parte de mis intervenciones públicas son a la contra. Leo o escucho malos razonamientos, opiniones desinformadas, y a partir de ahí intento mostrar sus falacias, sus trucos. En mis escritos abundan sintagmas como «supuestos», «no se sigue», «es inconsistente», «carece de aval empírico». En ese sentido, las tertulias radiofónicas resultan una buena fuente de inspiración.
5. ¿A quién pediría consejo literario?
Como te decía mi escritura es ensayística. En ese sentido, hay unos cuantos lectores fijos, personas cercanas, a las que les paso lo que escribo y, sobre todo, detectan si los razonamientos están bien formulados. Yo hago lo mismo. Siempre que se trate de textos no literarios. Me cuestas dar opiniones a los amigos sobre su escritos poéticos o novelísticos. Hay algo inasible en esos quehaceres que se lleva mal con lo que yo hago mejor. Bueno, puedo dar una impresión, una opinión precrítica, pero, precisamente por esa naturaleza, me lo pienso bastante antes de terciar cuando se trata de personas que quiero. Un mal razonamiento se puede demostrar, en algún sentido de la palabra «demostrar» y no cabe enfadarse. En el otro caso, en una narración, por ejemplo, resulta más complicado.
6. Si pudiera reencarnase en algún escritor/es, ¿a quién elegiría?
Pues quizá Russell o Borges, prosas limpias en los razonamientos y comedidas en el léxico, sin relleno de mampostería, la dignidad de las palabras sencillas, que no quiere decir vulgares.
7. ¿Qué recomendaría a los autores noveles?
Afán de verdad, compromiso con el propio quehacer, desatender ecosistemas tribales, mediáticos o modas. Una cierta limpieza de corazón. Cosa que no es sencilla si no tienes los ingresos asegurados con independencia de tus opiniones. Requiere coraje. Lo desarrollé con bastante detalle en El compromiso del creador (ética de la estética). Pero si quieres una versión condensada, piensa en If, el poema de Kipling.
La razón en marcha: conversaciones con Félix Ovejero
Julio Valdeón
Alianza, 304 pp., 19,95 €