Manuel Vilas (Barbastro, Huesca, 19 de julio de 1962) vive entre Madrid y Iowa City (Estados Unidos). Es uno de los principales poetas y narradores españoles de su generación y en la actualidad colabora en El País. Ha sido varias veces premiado por su poesía. Como novelista, Alfaguara le ha publicado España (2008), Aire nuestro (2009), Los inmortales (2012) y El luminoso regalo (2013). En 2015 editó el libro de relatos Setecientos millones de rinocerontes, en 2016 la biografía novelada Lou Reed era español y en 2017 el libro de viajes América. En 2018 ha sorprendido al mundo con Ordesa (Alfaguara), una novela autobiográfica que no deja de cosechar excelentes críticas.
© Fotografía del autor: Lisbeth Salas.
1. ¿Por qué es escritor?
La belleza del mundo, ¿qué hacer con ella?
2. ¿Tiene algún ritual para escribir?
Necesito música y una pantalla grande de ordenador.
3. ¿Cómo encaja las críticas?
Intento aprender de ellas. Creo que en este oficio siempre se está aprendiendo.
4. ¿Qué libro o libros está leyendo?
Los Ensayos del escritor estadounidense E. B. White (Capitán Swing).
5. ¿Cuánta importancia tiene el título de un libro?
Para mí, infinita. El título es la puerta. Tiene que estar limpia.
6. ¿Es un lector con prejuicios?
No. Leo de todo. Hasta los catálogos de IKEA.
7. El libro que le hubiera gustado escribir cuando escribió otro…
Muchos, y ninguno. Algo a mitad de camino entre Hojas de hierba, de Whitman y Pedro Páramo, de Rulfo.
8. ¿Qué libro no ha leído ni piensa hacerlo?
Me faltan libros por leer. Todo libro merece ser leído siempre. Jamás le diré que no a un libro.
9. ¿Qué hace si quiere escribir pero no está inspirado?
Leo, escucho música, miro por la ventana, me voy a un supermercado a comprar salmón y patatas fritas y cerveza 0.0.
10. ¿Existen los libros o autores malditos?
No. Solo existe la mala suerte y la injusticia.
11. ¿De quién es fan? (literariamente hablando)
Siempre he sido devoto de Franz Kafka.
12. ¿En qué libro «entraría» como personaje para vivir la historia in situ con los protagonistas?
En el Quijote.
13. ¿Puede elegir entre Oscar Wilde, Cervantes, Shakespeare, Virginia Woolf, Jane Austen, Poe y Lovecraft?
Cervantes siempre, porque es el mejor, porque amaba a los seres humanos, porque era compasivo y tolerante, y creía en la vida.
14. Si tuviera una ouija, ¿con qué autor o autora conectaría y qué le preguntaría?
Con Jesucristo, un excelente narrador oral. Le preguntaría por sus short stories. Son muy buenas esas historias, le preguntaría que de dónde las sacó.
15. Viaja al pasado y puede pasar un día con alguien ¿dónde y con quién?
Con mi madre, en la playa de Cambrils, a principios de los años setenta.
16. ¿Su leyenda urbana favorita?
Un cementerio de máquinas de escribir y de impresoras de escritores muertos, dicen que existe ese cementerio.
17. ¿Es usted quejica?
Un quejica con causa.
18. ¿Cuál es su monstruo o extraterrestre favorito?
Lou Reed.
19. ¿Qué tal su sexto sentido?
Creo que soy un poco médium, pero por amor.
20. ¿Ha visto un ovni, un fantasma, algo raro…?
Sigo viendo a la gente que quise y se marchó de este mundo.
21. ¿Le avergüenza que le hagan preguntas de este tipo?
No. Toda pregunta lleva dentro un poco de amor.
22. ¿En qué se parecen Manuel Vilas y Luis Buñuel?
En el humor, en la risa como una forma de reconciliación con la vida.
23. Dígame tres cosas que sean mejores que un libro.
El sexo, la comida, y la luz.
24. ¿Plancha, cose, cocina…?, ¿qué se le da bien aparte de escribir?
Cocino. Me gusta cocinar. Y conducir automóviles se me da muy bien.
25. ¿Cuál es la pregunta más extraña que le han hecho?
Ninguna pregunta me ha resultado extraña, la curiosidad es bienvenida siempre.
26. ¿Cuál es la pregunta que siempre espera o desea que le hagan y nunca le hacen?
¿Cómo haces para estar tan guapo y tan joven y tan delgado y tan atractivo?
27. La pesadilla que aún recuerda…
Las he borrado todas, he podido con todas. Ya no existen.
28. ¿Qué le daba miedo de niño y qué le da miedo de adulto?
De niño padecía terrores nocturnos. De adulto me dan miedo la enfermedad y la muerte.
29. Sus manías son…
Toco madera siempre que puedo. Me lavo las manos muchas veces. Tiene que oler a limpio en donde esté.
30. ¿Qué aprendió de sus padres?
De mi padre, la elegancia con la que vivió; de mi madre, la pasión por la vida.
31. ¿Qué preocupa antes, el peso o la calvicie?
El peso.
32. La persona que más admira… y ¿por qué razón?
A cualquiera que sepa hacer algo por otro ser humano porque le salga del corazón.
33. Si fuera un pecado capital, ¿cuál sería?
Lujuria.
34. ¿Y si fuera un animal?
León
35. ¿Ve normal o ve hortera que la RAE acepte stop y cambie Blue Jeans por bluyín?
Gracias a la RAE aún podemos entendernos los que hablamos español en el mundo.
36. ¿Qué palabra no aceptada aún añadiría Usted al DRAE?
No existe el sustantivo «desacompasamiento». Sí existe «desacompasado», pero no «desacompasamiento». Hay un momento de la vida en que los seres humanos pierden el compás, eso. Puede ser un momento de liberación, un momento hermoso.
37. ¿Tiene Donald Trump algo bueno ahora que sabemos que hasta el peluquín se le despega?
Un día dejará de salir por la tele, y será olvidado, como todos nosotros.
38. Cuénteme una metedura de pata sonada…
Darle, por error, la enhorabuena a la amante de un amigo por los hijos tan guapos que este amigo tiene con su mujer legítima.
39. ¿Puede contarme alguna broma que haya gastado?
Llamar por teléfono a un escritor fingiendo la voz de Juan Carlos I para felicitarle por haber ganado el Premio Cervantes.
40. ¿A qué es adicto?
Bebí mucho.
41. ¿Sabe qué es —sin mirar en Google— Charmander, yaoi o ectoplasma?
No, pero lo imagino y he acertado. Lo sé.
42. ¿En qué cree más, en los test de inteligencia o en la inteligencia emocional?
No creo en la inteligencia. Creo en la voluntad y en el amor. La inteligencia es la vanidad de los que no aman.
43. ¿Qué cree que hay después de la muerte?
La niñez, de nuevo.
44. De pequeño ¿qué quería ser de mayor?
Ser mi padre.
45. ¿Alguna vez perteneció a alguna tribu urbana?
Fui un roquero de pueblo.
46. ¿Qué admira en los demás que usted no tiene?
Sentirse en paz.
47. De niña me comía a escondidas pastillas de Avecrem, ¿hacía usted algo parecido?
Cuénteme alguna travesura de su infancia.
Comía mucho jamón de york y disparaba la escopeta de perdigones dentro de la casa. Le disparaba a los trofeos que ganaba mi padre como jugador de cartas.
48. Los hobbys dicen mucho de las personas, ¿cuáles son los suyos?
Me gusta hacer fotos a las habitaciones de los hoteles en las que me alojo. No sé si es un hobby. Tienen que ser instantáneas con máquina de fotos, no vale el teléfono móvil, lo que me obliga a llevar siempre mi cámara en la maleta.
49. ¿Chupachups, chicles, pipas, revistas…? Defínase ante un kiosco.
Alguna vez he comprado un deuvedé, alguna película. La última fue Torrente, el brazo tonto de la ley, por dos euros.
50. ¿Se ha divertido con esta entrevista-test o le hubiera gustado más atrevida?
He dicho la verdad. No he mentido. Así que lo he pasado bien, porque decir la verdad siempre me pone de buen humor
Ordesa, Manuel Vilas, Alfaguara, 392 pp., 18,90 €