«2018 fue el año del feminismo. Se declararon feministas muchas mujeres que jamás antes se hubieran atrevido a colocarse esa etiqueta, porque hasta entonces la opinión»
En 2001 se publicó El diario violeta de Carlota, un libro para contar el feminismo a adolescentes, que, sin embargo, leyeron y continúan leyendo muchas personas adultas.
Carlota recaba en su entorno la opinión que a la gente le merece el feminismo. Una mujer le contesta: «Las feministas son un peñazo. Siempre hablando de lo mismo, siempre discutiendo sobre los derechos de las mujeres. Es un discurso pasado de moda».
En 2016 se publicó en castellano el libro de Chimamanda Ngozi Adichie, Todos deberíamos ser feministas, que explica el feminismo para aprendices. En una de sus páginas, cuenta el consejo que le dio un hombre: «Que no me presentara nunca como feminista porque las feministas son mujeres infelices porque no pueden encontrar marido».
Además de los dos ejemplos aquí expuestos, son muchas otras las ideas similares en ambos libros, lo que resulta desalentador si se tiene en cuenta que han trascurrido quince años entre la publicación de uno y otro. Desalentador porque significa que la tan deseada igualdad de las mujeres ha avanzado, pero menos de lo que sería esperable.
A lo largo de todos esos años, decir en público que eras feminista resultaba un demérito y te obligaba a precisar que serlo no significa estar en contra de los hombres sino luchar por los derechos de las mujeres. Durante esos años, algunas personas se apuntaron a seguir el consejo que Carlota plasma con las gafas violetas, una metáfora luego popularizada y convertida en figura de uso común. Ponerse las gafas violetas significa comenzar a ver la realidad con una mirada nueva, impregnada por la perspectiva de género. Y es que nuestra mirada habitual viene condicionada por lo aprendido de modo que nos resulta imposible notar las discriminaciones hacia las mujeres.
La causa feminista recibió un espaldarazo el 20 de septiembre de 2014, cuando la joven actriz Emma Watson, embajadora de buena voluntad de la ONU, pronunció un discurso como inicio de una campaña solidaria —HeForShe— que promovía la igualdad de género y pretendía involucrar a hombres y niños como agentes de cambio. El apoyo de Watson, Hermione Granger en las películas de Harry Potter, fue importante pero no suficiente.
En 2019, Carlota y su diario violeta llegan a la mayoría de edad: 18 años, mucho antes de lo que lo hacía una mujer nacida en 1950. Esas mujeres la tenían fijada en los 25, a diferencia de los hombres, adultos a los 21. Pues bien, Carlota, antes de celebrar sus 18 años, pudo asistir, en 2017 y 2018, a una explosión del feminismo, que empezó en Hollywood con el movimiento MeToo.
En octubre de 2017, The New York Times y The New Yorker publicaron la acusación que decenas mujeres lanzaron contra el productor de cine Harvey Weinstein, un depredador sexual. El 15 de octubre la actriz Alyssa Milano utilizó en Twitter la etiqueta #MeToo, usada en el pasado por Tarana Burke para empoderar a las mujeres negras que habían pasado por situaciones sexuales no deseadas. Con esta frase, Milano quería animar a las mujeres víctimas de agresiones sexuales a denunciarlas. El movimiento MeToo prendió como una mecha y numerosas chicas y mujeres utilizaron la etiqueta; solo el 16 de octubre hubo más de 500.000 tuits con ella.
El movimiento MeToo fue un momento epifanía, como lo fue el asesinato de Ana Orantes en 1997, que abrió los ojos de España a la violencia de género. El movimiento MeToo posibilitó que, por fin, muchas mujeres, arropadas por la sororidad de otras, se vieran capaces de hablar en público de los asaltos sexuales sufridos. La celeridad con la que se propagó es atribuible a la conexión que permiten las redes sociales, y la visibilidad que tuvo se debió, sin duda, al hecho de que las promotoras fueran actrices de Hollywood.
2018 fue el año del feminismo. Se declararon feministas muchas mujeres que jamás antes se hubieran atrevido a colocarse esa etiqueta, porque hasta entonces la opinión pública -a quien el feminismo le resulta una piedra en el zapato- las había convencido de que ser feminista es indeseable y propio de mujeres amargadas. Entre 2017 y 2018 se publicaron una gran cantidad de obras feministas. Por falta de espacio, solo citaré algunas, mis preferidas. Las novelas Madre de leche y miel de Najat El Hachmi, Cárdeno adorno de Katharina Winkler y El cuento de la criada de Margaret Atwood. Las novelas gráficas Estamos todas bien de Ana Penyas, Más vale Lola que mal acompañada de Raquel Riba Rossy y El problema de las mujeres de Jacky Fleming. Los libros de no ficción Monstruas y centauras de Marta Sanz, Apegos feroces de Vivian Gornick y Los hombres me explican cosas de Rebecca Solnit. Libros para niñas y niños Corazón de cactus de Anna Manso y Las princesas también se tiran pedos de Ilan Brenman y Ionit Zilberman.
Después de esta eclosión, no resultó tan extraordinario, aunque sí conmovedor y esperanzador, que el 8 de marzo de 2018, Día Internacional de la Mujer Trabajadora, es decir, de todas, porque raramente una mujer puede permitirse el lujo de estar mano sobre mano, que la manifestación que lo conmemora fuera un éxito sin precedentes.
Centenares de miles de personas en todo el mundo -mujeres mayores y jóvenes y también muchísimos hombres-- asistieron a la movilización convocada, como cada año, por asociaciones feministas. Las que durante años hemos participado en ella somos testigos de la marea humana que gritaba las consignas feministas.
El movimiento se ha ido extendiendo por todo el planeta. La lucha contra la ablación en el continente africano. Las mujeres indias formando un muro humano para exigir la igualdad a partir de la crítica de una prohibición milenaria que impide a las mujeres en edad de menstruar su entrada en los templos. La lucha contra la violencia sexual y los feminicidios en todo el mundo…
Sin embargo, no es oro todo lo que reluce. Las estadísticas en España dejan claro que estamos todavía muy lejos de la igualdad. El poder económico, político, ejecutivo y académico sigue en manos masculinas. La conciliación y el trabajo del cuidado y, por ende, los salarios bajos y las pensiones de jubilación indignas, en manos femeninas. Y una de las mayores lacras, la violencia contra las mujeres por el simple hecho de serlo, no solo no se ha erradicado, sino que es negada por algunos con estadísticas espurias.
Desde 2003 hasta el momento, son más de 1000 las mujeres asesinadas, una cifra escalofriante que, de ser consecuencia del terrorismo político o religioso, levantaría ampollas. Como «solo» es consecuencia de la ideología machista, a muchos no les parece tan grave. Tampoco la violencia sexual decae. En 2018 se hizo tristemente famoso un juez que juzgaba una violación en grupo de 5 hombres fornidos contra una chica al pedir la absolución de los violadores arguyendo que solo veía a una mujer practicando «actos sexuales en un ambiente de jolgorio y regocijo». Una mentalidad machista y embotada por la pornografía.
Necesitamos, pues, seguir adelante con MeToo, con HeForShe, con SiTocanAUnaNosTocanATodas y con los eslóganes que haga falta, no solo porque queda mucho para alcanzar esa igualdad que es de justicia, sino también para que los hombres puedan disfrutar una masculinidad libre de estereotipos.
El diario violeta de Carlota no es exactamente una novela ni un diario, sino un libro a caballo entre la ficción y la no-ficción, una guía subversiva que nos invita a reflexionar –a veces con humor, otras con rabia y muchas veces con impotencia– sobre la situación de la mujer en el mundo actual y nos anima a continuar la cadena violeta. El éxito del libro fue tal que constituyó el primer título de una saga y se convirtió en una lectura formativa para adolescentes y en una útil herramienta para que padres e hijos trataran sobre diversos temas. Como en todos los diarios de Carlota, la protagonista desglosa datos, información y estadísticas sobre el tema que trata, para que el joven lector pueda reflexionar y formarse una opinión por sí mismo y decidir su postura en base a ello.
Cada uno de los siguientes títulos se centra en un tema y se rodó una exitosa versión de El diario rojo de nuestra protagonista.
Gemma Lienas es escritora y ha publicado más de ochenta títulos, tanto de literatura infantil y juvenil, como para adultos y ensayos. Ha sido diputada en el Parlament de Catalunya, profesora y directora de ediciones en varias editoriales y su última obra es El hilo invisible (Destino)/ El fil invisible (Edicions 62).
NOVEDADES
PARA PENSAR
#WETOO, Octavio Salazar, Planeta,
288 pp., 16,90 €
La cuarta ola feminista ha irrumpido con fuerza arrolladora en la vida cotidiana y mientras las redes lanzan con frecuencia mensajes contradictorios, pervive el machismo más tóxico y violento.
¿Cómo están viviendo todo esto los más jóvenes? Las chicas van sabiendo quiénes son, pero los chicos andan desconcertados entre modelos viejos de masculinidad y la falta de nuevos referentes. Octavio Salazar nos ofrece unas páginas comprometidas y apasionadas para ayudar a los y las más jóvenes a convertirse en personas igualitarias.
HISTORIA DE LA MISOGINIA, Anna Caballé, Ariel, 416pp., 21,90 €
Un libro de referencia en estudios de género, muy oportuno en estos tiempos de conciencia feminista y empoderamiento de la mujer. ¿Es posible hablar de pensamiento misógino en la sociedad actual? ¿Qué huellas ha dejado la misoginia explícita en tantas obras y autores clásicos? Un recorrido peculiar por los juicios y las descalificaciones que ha merecido la mujer, por el mero hecho de serlo, a lo largo de los siglos. De la Baja Edad Media al presente más inmediato, y desde los grandes misóginos medievales —don Juan Manuel, Jaume Roig, Francesc Eiximenis, el Arcipreste de Talavera— hasta la actualidad, pasando por Quevedo, Gracián, Leandro Fernández de Moratín y Cela, entre otros, incluidas mujeres.
FEMINISTA Y DE DERECHAS, Edurne Uriarte, Almuzara, 176 pp., 17.95 €
El feminismo sigue siendo necesario porque persisten la desigualdad y la discriminación. Pero un feminismo construido desde nuevas bases críticas y con un activismo abierto a todas las ideologías, compatible con la izquierda y la derecha. Ni el sexismo es propio de la derecha o de la izquierda, ni el feminismo pertenece a un lado del arco ideológico. Al contrario, precisamente por su objetivo, la igualdad de las mujeres, debe aspirar a estar presente e influir en todas las ideologías y partidos políticos.
TIERRA DE MUJERES, María Sánchez, Seix Barral, 192 pp., 17 €
Hija y nieta de veterinarios, vinculados a la tierra y a los animales, María Sánchez es la primera mujer en su familia en dedicarse a un oficio desempeñado tradicionalmente por hombres. Su día a día como veterinaria de campo pasa por recorrer España en una furgoneta y esquivar las miradas en un entorno predominantemente masculino. En este personalísimo ensayo, se propone servir de altavoz y dar espacio a todas las mujeres silenciadas en los campos españoles, a aquellas que tuvieron que renunciar a una educación y a una independencia para trabajar la tierra con las manos y cuidar de sus familias.
MANIFIESTO DE UN FEMINISMO PARA EL 99 %, Cinzia Arruzza, Tithi Bhattacharya y Nancy Fraser, Herder, traducción de Antoni Martínez Riu, 112 pp., 9,80 €
Escrito por tres de las organizadoras de la Huelga Internacional de Mujeres en EE.UU de 2018, este manifiesto tiene un propósito: llevar a cabo una operación de rescate y corrección de rumbo de las luchas feministas hacia el resto de la población, y proponer una reorganización total de la sociedad. El feminismo no debería detenerse con ver a las mujeres representadas en la cima social, sino que debe involucrarse en las perturbaciones políticas, la precariedad económica y el agotamiento socio-reproductivo. Se plantea la necesidad de construir otro feminismo con una definición diferente de lo que se entiende por cuestión feminista, una orientación de clase distinta y un ethos también distinto, radical y transformador.
BRUJAS, Mona Chollet, Ediciones B, traducción de Gemma Moral Bartolomé, 253 pp., 18,90 €
Un brillante ensayo sobre la herencia patriarcal en el pensamiento europeo, desde la caza de brujas hasta la actualidad.
Este libro explora tres estereotipos de mujer y el proceso que condujo a su estigmatización, así como lo que queda en la actualidad de esa visión: la mujer independiente, puesto que viudas y solteras fueron especialmente perseguidas; la mujer sin hijos, puesto que la época de las persecuciones señaló el fin de la tolerancia hacia las que pretendían controlar su fertilidad; y la mujer mayor, convertida desde entonces en objeto de aversión.
CAZA DE BRUJAS, Alfonso Trinidad Hernández, Luciérnaga, 175 pp., 16,95 €
El origen de la brujería, como parte de la magia, la evolución y desarrollo de la inquisición y la aparición de los cazadores de brujas retrata una sociedad y una realidad de nuestra historia que debería quedar grabada a fuego en nuestro imaginario colectivo, no ya como algo que no debería volver a suceder sino como muestra de la maldad que puede poseer al ser humano. Una historia de poder, codicia y manipulación que se nutrió de las supersticiones y de la creencia de que el mal y el bien y sobre todo la magia para acercarse a ambos, existe.
AGUDAS. MUJERES QUE HICIERON DE LA OPINIÓN UN ARTE, Michelle Dean, Turner, traducción de Laura Vidal, 368 pp., 24,90 €
Las mujeres de este libro comparten una cualidad: todas ellas destacan por sus aportaciones al pensamiento y a las transformaciones culturales del siglo xx. Hannah Arendt, Joan Didion, Nora Ephron, Mary McCarthy, Dorothy Parker, Susan Sontag, Rebecca West, Janet Malcolm, Pauline Kael, Coco Chanel, Lillian Hellman o Frida Khalo desafiaron las expectativas del momento y se hicieron un hueco en un mundo de hombres.
FUIMOS NOSOTRAS, Magis Iglesias, Debate, 320 pp., 18,90 €
En cuatro décadas de vida que cuenta ya la Constitución de 1978, mucho es el material que encontramos en relación a los parlamentarios constituyentes, padres de la Constitución o ponentes de la carta Magna. Sin embargo, si en algo resultó revolucionaria la democracia española fue en el cambio que supuso para las mujeres. Con esta obra eminentemente periodística, Magis Iglesias pretende seguir la huella de las mujeres pioneras en hacer historia y ejercer poder político en democracia, esas madres de la Constitución que estuvieron ahí y de las que nadie habla.
BUENAS Y ENFADADAS. EL PODER REVOLUCIONARIO DE LA IRA, Rebecca Traister, Capitán Swing, traducción de Amelia Pérez de Villar, 368 pp., 21 €
Parece que en 2018 la ira de las mujeres ha aparecido repentinamente. Pero mucho antes, la ira de las mujeres ha sido políticamente catalítica. La historia de la furia femenina y su signi¬ficado cultural demuestra la larga historia de amargo resentimiento que ha envuelto al lento aumento del poder político de las mujeres en Estados Unidos, así como las formas en que se recibe la ira cuando se trata de mujeres y no de hombres. Traister rastrea la historia de la ira femenina como combustible político, cómo se percibe la ira en función de su dueño, así como la caricatura y la deslegitimación de la ira femenina.
ENFURECIDAS, Soraya Chemaly, Paidós, traducción de Ana Pedrero Verge y Antonio Francisco Rodríguez Esteban, 448 pp., 18,90 €
Contrariamente a lo que defiende la retórica de la autoayuda y a lo que llevamos toda la vida oyendo, la furia es uno de nuestros recursos más importantes para luchar contra la opresión política y personal. Se nos ha dicho que debíamos reprimirla mientras dejábamos que corroyera nuestros cuerpos y mentes, pero lo cierto es que la furia es nuestro camino.
Siguiendo los pasos de manifiestos feministas clásicos, este es un libro revelador dirigido a la mujer del siglo XXI, un accesible credo que nos ofrece las herramientas para que reinterpretemos nuestra furia y nos sirvamos de su poder para un cambio positivo.
MANUAL ULTRAVIOLETA, Clara Serra, Ediciones B, 200 pp., 16,90 €
Una celebración del feminismo que también pretende desactivar algunos prejuicios, así como explicar aquellas cosas que menos se han entendido o más resistencias generan.
Un libro pedagógico accesible, con ejemplos y anécdotas de la historia el feminismo para encarnar las ideas en sucesos más concretos y sensibles. Una obra indispensable donde el feminismo constituye una serie de herramientas para identificar la desigualdad en nuestros contextos y analizar las situaciones cotidianas que vivimos, así como repensarnos a nosotros mismos.
MUJERES QUE PISAN FUERTE, Karin Sagner, Maeva, traducción de Lidia
Grifoll Álvarez, prólogo de Marta Sanz
Un libro bellamente ilustrado y un homenaje a las mujeres que trazaron nuevos senderos de libertad, aventura e independencia.
La autora, a partir de obras de Sorolla, James Wallace, John Singer Sergent, Gustave Coille-botte, Aristide Maillol o Gustave Courbet, cuenta la historia de esas mujeres cuyos paseos no solo les sirvieron para respirar aire fresco, sino también para descubrir el mundo.
PARA ¿REÍR?
MACHISTADAS, Rocío Vidal, Plan B, 120 pp., 15,90 €
Un libro de tiras cómicas que, a través de experiencias reales (propias y relatadas), habla de los múltiples machismos, micromachismos y situaciones que enfrentan las mujeres (y, ¡sorpresa!, los hombres también) en su día a día. Con mucho humor, y también información sumamente útil, Rocío Vidal, a través del dibujo, dirá las cosas por su nombre.
FEMINISMO PARA TORPES, Nerea Pérez de las Heras, Martínez Roca, 224 pp., 17,90 €
Desde que naces, el mundo entero empieza a darte pistas, instrucciones y órdenes sobre tu papel como mujer. Juntas conforman un aparato complejo, antiguo, fuerte, que a través de las generaciones ha usado mil trucos para que bajemos la voz, potenciemos algunas partes de nuestro ser y encojamos otras, para entrar, retorcidas y a duras penas, en el molde de lo que debe ser una mujer. Un recorrido por las preocupaciones y contradicciones del feminismo contemporáneo, desde lo más general hasta lo más íntimo, pero siempre utilizando el arma más poderosa para la crítica: el humor.
JUEGOS REUNIDOS FEMINISTAS, Temas de Hoy, Ana Galvañ y Patricia Escalona, Temas de Hoy, 124 pp. 14,90 €
A estas alturas es imposible esquivar el tema. Da igual que tu entorno sea el del activismo de género o el de la peña madridista de tu ciudad, nos apostamos los ovarios a que en el último año has discutido sobre feminismo.
Este libro es un cuaderno de actividades repleto de juegos y explicaciones para que tus discusiones ganen en material para risas y para enfados, pero sobre todo en profundidad. Un libro para pasarlo bien sola o acompañada, pero es también un recorrido provocativo hacia el cambio.
BIOGRAFÍAS
LOU ANDREAS-SALOMÉ, Isabelle Mons, Acantilado, traducción de Juan Díaz de Atauri, 396 pp., 22 €
Lou Andreas-Salomé fue una de las personalidades más fascinantes de finales del siglo XIX y principios del XX. Quiso romper con el papel que la sociedad y la familia le habían asignado, y desde muy joven tomó parte activa en los más vanguardistas círculos intelectuales de Europa hasta convertirse en autora de una obra prolífica y diversa (literaria, crítica, filosófica y psicoanalítica) que sólo publicó parcialmente en vida. Esta biografía nos descubre la singularidad de una mujer notable a través del estudio de su obra y del diálogo con algunos de sus contemporáneos, como Nietzsche, Rilke y Freud, y muestra que la libertad de espíritu que la caracterizó fue la expresión de una mujer ávida de conocimiento que supo defender su autonomía intelectual, sentimental y vital.
FICCIÓN
DOS MUJERES DESNUDAS, Elisenda Roca y María Ripoll, Suma, 273 pp., 17,90 €
La directora más taquillera de la historia del cine español, Maria Ripoll, y la reconocida periodista, escritora y directora teatral, Elisenda Roca, se unen en este libro para dar voz a las mujeres.
Como buenas amigas y vecinas, quedaban en la terraza de Maria o en casa de Elisenda y, a menudo, de la charla salían historias de distintas mujeres, increíbles, potentes y divertidas. Y aquí lo tenéis. El retrato de veintisiete mujeres que desnudan, sin complejos, su realidad delante de vuestros ojos.
EL PAÍS DE LAS MUJERES, Charlotte Perkins Gilman, Guillermo Escolar editor, traducción de Jonathan Marqués, introducción de Eulalia Piñero Gil, 191 pp., 16 €
Una novela de ciencia-ficción, en la que Perkins Gilman expone y critica, ingenio y cierta ingenuidad los males de la sociedad capitalista, los peligros de la era industrial, los papeles sexuales y la educación de la infancia.
Tres jóvenes exploradores estadounidenses llegan al país de las mujeres, atraídos por su leyenda. Donde esperaban encontrar placeres desenfrenados, son anestesiados, encarcelado y reeducados. Se ven obligados a reexaminar sus suposiciones sobre el rol femenino al encontrarse con un país democrático, perfectamente organizado y funcional, sin la presencia masculina. La autora dibuja un modelo social alternativo y formula sus propias teorías sobre la socialización del género y las funciones biológicas de la mujer.
DEERBROOK, Harriet Martineau, Ático de los Libros, traducción de Claudia Casanova, 536 pp., 29,90 €
La autora de este libro fue una escritora y periodista protofeminista que se dedicó a escribir sobre sociología, economía y religión con afán divulgativo.
Cuando las hermanas Ibbotson, Hester y Margaret llegan al apacible pueblecito de Deerbrook para alojarse con el señor Grey y su esposa, enseguida saltan los rumores de que una de ellas se casará con el médico local. Aunque este se siente atraído por Margaret, se casa con la hermosa Hester, y termina atrapado en lo que se le antoja un matrimonio infeliz. Además, un malicioso rumor le acusa de saquear tumbas, lo que amenaza su carrera y convierte su vida en un infierno. Un soberbio retrato de la clase media en la época victoriana, los prejuicios, la ignorancia, la presión social y los efectos que la opinión y las instituciones públicas tienen en las relaciones interpersonales.
INSÓLITAS, VVAA, edición a cargo de Teresa López Pellisa y Ricard Ruiz Garzón, Páginas de Espuma, 528 pp.,24 €
Escritoras latinoamericanas y españolas han asaltado la literatura de nuestro idioma y han producido un giro fértil con nuevas vías de creación, análisis y reflexión. Literatura que alude y no elude las problemáticas internas y externas de las mujeres o, lo que es lo mismo, de nuestra convivencia personal, social, política y cultural. Distintas geografías y generaciones, todas ellas unidas por una distorsión, una ruptura de la realidad que genera un grado de lo fantástico entre lo insólito (esa cotidianidad rota por lo inusual) y lo terrorífico (cuando lo oscuro irrumpe en nuestras vidas). Todo lo insólito que seamos capaz de imaginar ya está escrito. Por ellas. Son insólitas.
GAME BOY, Víctor Parkas, Caballo de Troya, 173 pp., 14,90 €
Víctor Parkas dispara contra la hombría en estas páginas, una suma endiabladamente pop de sangrantes columnas de opinión y relatos tragicómicos es un dardo directo al ocaso de las masculinidades tóxicas.
Una reflexión sobre la masculinidad contemporánea a través de relatos breves y tragicómicos en primera persona.
POESIA
BREVIARIO PARA MALAS MUJERES, Rosa García Perea, Berenice, 74 pp., 10 €
Un libro valiente que recoge la experiencia vital de mujeres hijas del Baby boom y madres del mee too, que no dudaron, al igual que su progenitora Eva, en dar el bocado a la manzana, no sin miedo, para salir de ese paraíso que le habían construido los que entonces dominaban la tierra.