Carmen Rigalt lleva muchos años dándole a la tecla, pero se ha movido más en el mundo periodístico que el narrativo. Estudió Periodismo en la Universidad de Navarra y comenzó a trabajar en el diario Sol de España, de ahí pasó al mítico Pueblo, y con los años ha trabajado en Informaciones, El Periódico de Catalunya, Diario 16, la revista Tiempo y El Mundo. En la actualidad escribe para El español. En 1997 fue finalista del Premio Planeta con Mi corazón que baila con espigas y se la considera una de las columnistas más apreciadas y brillantes de la crónica social española. Ahora publica Noticia de mi vida (Planeta) donde da cuenta de su talento en una obra donde desgrana mediante recuerdos fragmentos de su propia vida. Una gran oportunidad para conocerla mejor.
© Pepa Málaga.
ANIKA LILLO. Anika Entre Libros. www.anikaentrelibros.com
1- ¿Por qué es escritora?
Porque mis mayores se empeñaron en decirme una y otra vez que tenía facilidad para escribir y me lo creí.
2- ¿Tiene algún ritual para hacerlo?
No me lo parece. Ahora que lo pienso, algún ritual no me vendría mal. Me haría más interesante.
3- ¿Cómo encaja las críticas?
Me gustaría hacerlo con lucidez, pero eso es muy difícil.
4- ¿Qué libros está leyendo?
Por problemas visuales leo con bastante dificultad, especialmente si la letra es pequeña. Ahora estoy leyendo varios libros a la vez, lo que significa que no leo ninguno en serio. Los títulos que tengo a mano son El olvido que seremos, de Héctor Abad, Manual para mujeres de la limpieza, de Lucia Berlin, Tres pisos, de Eshkol Nevo, Sé por qué te miento, de Viviana Fernández-Pico, Ava en la noche, de Manuel Vicent…
5- ¿Cuál es el libro más espectacular, especial o raro que posee?
Soy machacona e insistente, y cuando descubro una canción o un libro, los leo o escucho hasta aburrirme. A los 15 años, mis amigas me regalaron Notes disperses, de Josep Pla, y no he parado de leerlo. Es un libro de tapas rojas, encuadernado en piel, que tiene un olor característico.
6- Dígame qué libro le hubiera gustado escribir y escribió otro…
Eso es una gilipollez. ¿Le sirve que conteste Romeo y Julieta o El Quijote? ¿No? Entonces apunte El relato de un naúfrago. Me lo dedicó Gabo.
7- ¿Qué libro no ha leído ni piensa hacerlo?
La mayoría de los que tengo en el estudio. Si han aguantado hasta hoy, podrán seguir haciéndolo.
8- ¿Cree que existe eso que llaman literatura de mujeres?
Sí, pero no es lo mismo que la literatura femenina.
9- ¿Cuántos libros lee al año?
Pocos. Algunos me los leen terceras personas.
10- ¿De quién es fan?
Ahora, de nadie. Antes, cuando tenía 14 o 15 años, lo era de muchos escritores, incluidos algunos que no lo merecían; por ejemplo, me parecía exótico Campos de Castilla. ¡Hasta fui fan de Azorín! En mi escritorio tengo una carta enmarcada que me escribió el de Monóvar antes de morir.
11- ¿En qué libro entraría como personaje para vivir la historia in situ con los protagonistas?
En Anna Karenina y El gatopardo, por románticas y estupendas, aunque en la de Tolstói pasaría mucho frío.
12- ¿Puede elegir entre Oscar Wilde, Cervantes, Shakespeare, Virginia Woolf, Jane Austen, Poe y Lovecraft?
Si elijo a Shakespeare y a Cervantes, me tomará por pretenciosa. Prefiero ser más modesta y elegir a Jane Austen y a Virginia Woolf.
13- Si tuviera una ouija, ¿con qué autor o autora conectaría y qué le preguntaría?
No me gustan las novelas de ultratumba; además, tampoco tengo ouija. Me encantaría pasar una velada (o más) con Albert Camus, pero no en el más allá sino en el más acá.
14- Viaja al pasado y puede pasar un día con alguien ¿dónde y con quién?
Con Robert Graves en Deià (Mallorca) cuando él vivía allí, alrededor de los años 30. Por supuesto sin Laura Riding, su mujer, porque era muy malona. También me gustaría ir a Corfú con los Durrell, que recibían a Henry Miller y a otros amigos.
15- ¿Su leyenda urbana favorita?
La última que ha generado la política. No se la pierda. Esta vez le ha tocado a la ministra portavoz.
16- ¿Qué tal su sexto sentido?
Esta pregunta no la sé. Pero puedo improvisar sentidos de repuesto… Todo es cuestión de ponerse.
17- ¿Ha visto un ovni, un fantasma, algo raro?
Nunca he visto un ovni. Y tampoco fantasmas. En cambio, de noche me dan miedo los muertos…
18- ¿Le avergüenza que le haga preguntas de este tipo?
No me avergüenza que usted me haga las preguntas. Lo que me avergüenza es contestarlas.
19- Cuénteme una metedura de pata sonada.
Cuando hacía redacciones, en el cole, me gustaba utilizar palabras estrambóticas y siempre metía la pata. Un día me mandaron escribir sobre mi mejor amiga, que era bastante alta y yo puse que tenía una altura indescifrable. Me quedé tan fresca. No pasaba de ocho o nueve años, era una cursi.
20- ¿Cuál es la pregunta o proposición más extraña que le han hecho?
Siempre que me preguntan en qué pienso, me quedo muda. Es una pregunta de entrometidos. Respecto a las proposiciones, son cosas típicas de películas.
21- La pregunta que nunca le hacen y le gustaría que le hicieran.
Cada vez me lo pone más difícil… Me gustaría un juego de preguntas y respuestas como las que le hacía Richard Gere a Julia Roberts en Pretty Woman. Algo divertido.
22- ¿Qué le cabrea especialmente y con qué se parte de risa?
Me cabreo con los chistes malos y me parto de risa con los políticos estirados.
23- ¿Cómo ha reaccionado ante puñaladas traperas?
La puñalada trapera es, como su nombre indica, aquella que no se da de frente. Por inesperada, sienta fatal.
24- Si fuera presidenta del Gobierno ¿cuál sería la primera medida que tomaría?
Pediría un jefe de gabinete como Bertín Osborne.
ANIKA LILLO.
Anika Entre Libros.
www.anikaentrelibros.com